Inventando Pólvora: Trás 20 años en
la Capoeira Angola. Como es llegar de esa tradición a una universidad, que
es un espacio elitizado, blanco y masculino y escribir una tesis que
cultiva un conjunto de valores que no es el de este espacio y que es
aparentemente opuesto a lo que allí se privilegia? Contra Mestre Janja: Contra Mestre Janja:
Como dijiste, tengo ya más de 20 años de iniciación en la Capoeira Angola
y en mi trayectoria, aun en Bahia, en inicios de los 80, cuando
comenzábamos a articular la fuerza del discurso de resistencia cultural de
la Capoeira Angola, una de las necesidades era articular alianzas, nos
impusimos la tarea de forzar la universidad a reconocer el legado de la
cultura banto en Brasil., existe un olvido planeado sobre el legado banto
en Brasil. Era fundamental que rompiéramos con algunas ideas
preestablecidas, entre ellas, el lugar en dónde estaba posicionada la
capoeira en la historia del conocimiento en Brasil (como manifestación
folclórica o deportiva). Eso fue hecho a través de este principio: ubicar
la capoeira dentro del legado de los pueblos bantos en Brasil. A partir de
ahí, nos dedicamos a una dupla militancia: una, dar visibilidad al
pensamiento y resistencia de Mestre Pastinha. Y la otra, denunciar la
hegemonía yoruba, demostrando lo mucho que la formación de esa matriz tuvo
de ideológica, que se aproximaba mucho a estructuras de blanqueamiento -
una de las pruebas de eso era la valorización sobre un conocimiento de que
algunos de esos grupos tenían de la escrita. Aun hoy, una de las formas
que las organizaciones de Capoeira Angola tienen de hacer su "ginga", su
enfrentamiento frente a la capoeira moderna, es valorizando aquello que la
capoeira moderna, para ganar la oficialidad, abandonó: las africanidades.
El Grupo de Capoeira Angola Pelourinho (GCAP) asumió esta vanguardia, y en
muchos momentos, necesitábamos una comprensión más profunda sobre, por
ejemplo, estructura y organización de los quilombos (1). Teníamos una pauta anual de seminarios y traíamos profesores
universitarios. Toda nuestra trayectoria viene acompañada por
investigadores, en Brasil y en los EEUU: ellos nos ofrecen parte de sus
discursos, buscan en nosotros aquello que necesitan. Estudiábamos la
capoeira a través de las cosas de la "gran roda" (2). Esa generación marcó profundamente la historia de la
capoeira. Un marco diferencial sobre el cual ya nadie pasa al margen: los
angoleiros actuamos como capoeiristas diferentemente y no abrimos mano de
la matriz africana de la capoeira. Es nuestro rechazo sobre el discurso de
la capoeira que nace en el sistema esclavista, de toda una cultura que es
simple consecuencia del sistema esclavista. Trajimos un enfoque anterior,
incluso para comprender porque la capoeira ganó esa caracterización dentro
de la historia de Brasil. Entonces, cuando entré a la Universidad de São
Paulo (USP) para hacer una maestría, trayendo un conocimiento de matriz
africana, yo, como vario negros, tuve también la dificultad de primero
enseñar para esas personas (profesores) sobre qué estaba hablando, para a
partir de ahí ser evaluado por ellas en sus bases teóricas. Encontré una
USP con poco conocimiento sobre la existencia de estilos dentro de la
capoeira. Dentro de la Capoeira Angola podemos orientar nuestra mirada
para la diversidad de los pueblos africanos en Brasil. Hoy sigo con una
investigación en nivel de doctorado sobre Capoeira Angola y ese mi trabajo
rompe con un silencio (académico) de treinta años.
Inventando Pólvora: Y como podríamos
ver la generación de capoeiristas angoleiros anteriores a la suya, que no
tuvo acceso a educación. Por ejemplo, Mestre João Grande, cuando él habla
del cuidado que se debe tener con el alumno nuevo, o cuando habla de que
el aprendizaje de la capoeira no debe ser segmentado, sino que el alumno
debe inserirse desde el inicio de forma completa el ritual de la capoeira.
Esas personas que son tan sabias y sin educación formal... hay entre ellas
y la sociedad un hueco que por veces parece imposible que se
traspase.
Contra Mestre Janja: Si piensas la generación
de un Mestre João Grande, de un Mestre João Pequeno, de um Mestre Curió,
ellos no tuvieron acceso a las formas oficiales de educación, y Brasil,
como no tiene una tradición sobre la importancia de estos memoriales
vivos, no valorizó al punto de él (Mestre João Grande) permanecer en el
país, él está hoy en los EEUU, vive otra realidad, incluso del punto de
vista de su propia auto-estima y dignidad. La diferencia de mi
generación es que - no teníamos: podríamos tener acceso a la educación
formal. Cuando comenzamos en el GCAP, Paulinha y yo éramos las únicas
que estábamos en universidad y éramos las mujeres nuevas llegando a la
capoeira y el grupo percibió un diferencial con el cual la capoeira no
estaba acostumbrada: la mujer hablando y actuando como capoeirista, en
lo que dice respecto al especifico de la capoeira: dominio corporal,
filosófico, musical, produciendo reflexiones políticas sobre la
capoeira. Y éramos un grupo formado por negros de los barrios de
periferia y muchas de las personas de esos barrios viven lo que
podríamos llamar "desestímulo por desaliento": como ellas no tienen
referencias, no creen en la posibilidad de intentarlo y nosotros
producimos la derribada de ese muro de los desalientos, llevábamos la
posibilidad de que eso pudiera ocurrir, éramos referencias porque
nuestro origen era el mismo suyo. Es a partir de ahí que comenzamos un
trabajo produciendo nuevos pensares que tuvo como resultado el
entendimiento de un grupo que se fortaleció por lazos de cooperación,
sobretodo amistad. Es también un hacer colectivo, tengo un compromiso
con los míos, es una militancia vuelta hacia la promoción de esas
personas que socialmente no tenían oportunidades y buscamos hacer con
que nuestro conocimiento, o por lo menos el hecho de estar en un espacio
para este grupo cerrado (la universidad), que haga algún sentido para
nuestra militancia. Hoy somos acusados por algunos de haber entregado la
Capoeira Angola a los intelectuales. En realidad, los capoeiristas
angoleiros que descendemos de esa matriz, nos hicimos intelectuales
dentro de la capoeira, promovimos una reflexión a partir de los soportes
intelectuales de la propia capoeira y a partir de ahí, nos sentimos
mejor instrumentalizados para enfrentar una estructura institucional que
hasta entonces era inaccesible, pero si alguién cree que eso rompe con
la "pureza" de la Capoeria Angola, estoy en desacuerdo: si cogemos la
historia de Brasil y vemos dónde ella (la capoeira) llegó, lo hizo por
su capacidad de leer el contexto en el cual estaba inserida. Si en un
determinado momento ella se prestó a la guardia nacional de la princesa
Isabel, si forzosamente estuvo en la guerra de Paraguay o si ella
constituyó las maltas que sustentaron como bases armadas a liberales y a
conservadores en la época republicana, es una prueba del entendimiento
del capoeirista sobre su contexto. Es porque conocemos estas
trayectorias de la formación oficiales que no admitimos algunas
imposiciones, como el caso del Conselho Nacional de Educacão Física que
quiere obligar la formación de los profesores de educación física (como
prerrequisito para ser profesores de capoeira). Y ahí, cuantas más
inquietudes podamos llevar para los mundos de la capoeira, de la
academia, de las artes, las llevamos. Me pondría muy preocupada hoy si
el capoeirista no comprendiera que esos niveles de educación formal
hacen parte de un estilo de juego fundamental para el capoeirista. Al
final no nos organizamos ya en maltas. Infelizmente (risas).
 desenho de
Mestre Pastinha
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Inventando Pólvora: Dijiste ahora que tuviste
que llegar a la universidad y presentar la Capoeria Angola a los
profesores. Esa es una característica de la Capoeira Angola. Sobre
cuales otras características nos podrías hablar? Contra Mestre Janja: No sé si una de las
características de la Capoeira Angola es adaptar-se al medio, porque
parece que el medio está fijo y si quieres algo te tienes que moldar.
Creo que la fuerza de esas tradiciones es la de producir fisuras en
sistemas aparentemente inamovibles. Ejemplo: São Paulo prima por
individualismo e inmediatismo, entonces llegamos aquí e implantamos un
trabajo de Capoeira Angola, lo que significa una fisura en un sistema
aparentemente hermético. Ella privilegia la estructura del grupo, lo que
Maffesoli llama de grupismo, o sea, más que el significado de yo estar
junto, de hacer con, es el sentido de estar junto. Tarde o temprano la
universidad será sacudida a punto de admitir que existen, hirviendo en
sus portones hacia fuera, otros modelos societales, que es de cierta
forma manifiesta en la oposición a los modelos euro-céntricos,
deshumanizados. La universidad se va a tener que admitir la
"antropología de su portón". Antiguamente uno no tenía grandes
referencias, hoy estamos entrando en un contexto de mundialización, a
través de un sistema de comunicaciones, traído principalmente por
internet, en dónde uno sabe cual es el potencial de transformación que
tienen las tradiciones para la formación de identidades de un pueblo, y
eso origina nuevas necesidades políticas.
Inventando Pólvora: El respeto por la novedad
que una persona puede significar es una cosa que yo creo percibir en la
Capoeira Angola que en cualquier momento puedes estar jugando con una
persona que te enseñe otra manera de sentir el mundo. Como percibes
eso? Contra Mestre Janja: No
usaría "individualidad", ese constituye un término de deshumanización,
pido licencia para usar "individuación" en el sentido junguiando de que
cada individuo prosiga sus marcas que son producidas, que están en su
ancestralidad, que lo hacen singular. Cuando digo que nuestro trabajo
combate las individualidades es porque él privilegia la individuación,
ese sufrimiento que es saber sobre si propio, sufrir con eso por
aceptación o rechazo, pero es un proceso de auto-reconocimiento en el
cual, como Jung decía, solo comprendo aquello en el cual me veo. Lo que
hace el buen capoeirista es su proceso creativo y este es único para
cada momento, es creativo en el sentido más amplio, quizá de la forma
como es dicho que Dios creó al mundo. Ese proceso creativo es el gran
emprendimiento de la Capoeira Angola, por eso ella pasa por la
individuación, todo proceso creativo, a mi modo de ver, está relacionado
a la comprensión, en mi caso, por ejemplo, a la comprensión de mi misma
aquí-ahora y el sentido de eso, no tanto el significado. Cada persona
que viene delante de mi, es una persona diferente, como cada una de
ellas me obliga a ser diferente, la relación es de complicidad absoluta.
Mestre João Grande nos enseñaba: "mira, cuando bajes al "pé do berimbau"
(3) y aprietes la mano al otro, te digas: "él es mejor que yo",
porque como nosotros estamos en ese universo de creación, puedo pensar
en una pregunta que él no tiene respuesta o lo contrario. Nuestro gran
ejercicio es tener habilidad, creatividad y entrega para tener
argumentos todo el tiempo. Tienes que en el día a día de la práctica de
la capoeira, jugártela para que si hoy construyes, ponte, esa casa,
mañana va a ser el trabajo de desconstruirla. Te relacionas con el
aprendizaje de una técnica, para desmoronar la técnica en función de la
creatividad, porque lo bello está en lo creativo. La belleza en este
caso es una de las referencias más grandes que se busca cuando se entra
en el juego, la belleza es tu encuentro con lo sagrado, es tu Dios
vibrando dentro de ti, salir de la roda de capoeira, es salir y decir
"¡Asu!, que maravilla, aquél tipo me pegó un cabezazo que fue una
perfección". En la medida en que tienes la posibilidad de estar inserido
en un grupo de capoeira que privilegia esos valores, creo que tienes la
esencia de la Capoeira Angola, cuando esos valores entran en el esquema
del individualismo, "poco tiempo", todo pasa a estar comprometido. Y, en
este sentido, la novedad es que existe hoy una juventud con una Capoeira
Angola más fast-food. Yo no me preocupo, la Capoeira Angola exige tanta
dedicación y compromiso, que si el trabajo de esas personas sale bien es
porque ellas encontraron ese compromiso. Cuando empezamos, los
practicantes de Capoeira Angola tenían vergüenza de decir que eran
angoleiros o que eran de candomblé, hoy día eso es status, cualquiera
puede entrar al candomblé o a la Capoeira Angola, después sabemos quién
se queda o quién no. El propio condomblé, la propia religión, la propia
capoeira, ellos depuran, entonces sabes distinguir, no tengo la más
mínima preocupación. Mucha gente iba a Bahia en los años 80 y nos
filmaba y llegaba aqui en Sao Paulo o en Rio o en Brasilia y cogía esos
movimientos y los trataban de enseñar a sus alumnos. Todos esos
elementos que hacen de la Capoeira Angola una práctica iniciática,
filosófica, que rompe con varias entendimientos de ese mundo
pasteurizado, que te saca a otros modelos interpretativos o pedagógicos
que vienen de la espera, de la escucha, de la formación del grupo, de un
entendimiento, del pertenecimiento a un tronco, esas cosas,
infelizmente, "Mestre Toshiba" no puede ofrecer. Sí tendría un problema,
que pasaría por una frustración, si percibo que una de las personas que
hace parte del grupo que coordino no lo comprendiera, porque el
dinamismo de esa iniciación, de ese modelo educativo de la Capoeira
Angola pone por tierra la distancia que me sepera de ellos en este campo
de conocimiento. Soy una persona que se entregó a mudanzas con ellos. Y
todo lo que tengo a más es tiempo de vivencia. Y mi tiempo de vivencia
es de orientado por el tiempo de vivencia de mis maestros que depuraron
en su lenguaje, en su enseñanza, lo que sabían y lo que no, lo que era
bueno y lo que no, que es lo que yo trato de hacer. Por lo demás,
estamos en el tiempo.
 Contra Mestre
Janja Foto cedida pelo FICA:
www.capoeira-angola.org |
Inventando
Pólvora: Si quieres decir algo más... Contra Mestre Janja: Ni falta decirlo: soy apasionada
por la Capoeira Angola, más que apasionada, porque fuimos llevados a
creer que la pasión es fugaz, que una sustituye otra, yo creo que ellas
conviven. Tengo una creencia en la capacidad que la Capoeira Angola
tiene de entendimiento de lo que llamé proceso de individuación, porque
ella entiende los códigos culturales que nacen de nuestro cuerpo,
desbanalizado, desmarginalizado, de nuestra alma, de nuestro
entendimiento espiritual sobre el propio cuerpo, sin una lectura
sentimentalista o venida de afuera. Cada persona es cada persona, el
entendimiento sobre eso yo creo que es una comprensión maravillosa de
convivencia y la capoeira puede traer a varias áreas del conocimiento
muchas novedades, bueno, nada de nuevo está bajo el Sol, a no ser
aquello que desmitifica las hegemonías diversas. Solo un gran cuidado
cuando hablo de capoeira, pues algunos periodistas crean modelos que
encaminan para sensacionalismos diversos, entonces ponen en la cabeza
que lo que le da puntos a la Capoeira Angola es ser contrario a la
Capoeira Regional (moderna) y así crean grupos estanques y aquí el
intento es de hacer que eso no sea comprendido de esa forma, porque
existe un compromiso histórico e ideológico de enseñar la Capoeira
Angola dentro de su inserción histórica en Brasil y a partir de ahí,
traer a la superficie elementos que dan sustentación a sus principio de
resistencia cultural. Creo ser fundamental comprender que dentro de la
historia de Brasil existe una tradición que en un determinado punto,
dados varios momentos de persecución, surge un modelo interpretativo
sobre esa tradición que impone nuevas mudanzas, nuevos caminos, pero que
aquella tradición originaria se mantiene.
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